2046: JOIN THE HOMOSEXUAL INTIFADA.



Estamos por fín en 2046, tras una época de convulsiones en la humanidad cuyo primer paso se inició en 2014, tras descubrirse que Osama era un actor porno de cine de cuarta, que esnifaba pegamento no muy lejos de Sunset Bvd. de nombre real Guy Yemen and Semen, caracterizado por el estilista personal de Omar Sharif y protegido por el servicio secreto americano, que lo rescató de hacer chapas en los bajos fondos de Hollywood:

Estalló la Cuarta Revolución en el mundo, los Otro Mundo Imposible habían tomado varios gobiernos de Europa, y varias gays de las listas del partido "Join The Homosexual Intifada", entre las que destacaba Edmunda Zerolia (-que había conseguido ser la ministra plenipotenciaria de exteriores de la Comunidad PanEuropea-), se hallaban en el poder dirigiendo nuestros destinos.

Desde el 2020 la sociedad se había homosexualizado casi al completo, y era raro que hubiera heterosexuales puros-puros, casi todo el mundo era bisexual o mariquita con pluma: el declive del movimiento Bear había hecho que en muchos países, se adorara masivamente por la población a Raffaella Carrá, y hubiera grandes fotos y estatuas dedicadas a ella en calles, rotondas y plazas, y lo mismo ocurría con Guy Yemen and Semen y sus gigantescos anuncios de slips semitransparentes en las vallas publicitarias, con modelos delgados que imitaban su look, patrocinados por una joint-venture de Hugo Boss y la casa Dim, que habían absorbido con una Opa de tócame la popa, a los Calvin Klein y una gran parte de la casa Ocean. Se rumoreaba que las grandes multinacionales del sector ropa interior (con la casa Zara urdiendo los entresijos), manejaban por fín los destinos del mundo.

En 2017, el funeral en Roma por Raffaella Carrá, había reunido a más de cuatro millones de Carristas, gays, transexuales y frikies del mundo que, tras asistir a las exequias, tomaron el Vaticano en masa y lo okuparon. Una avanzadilla, logró llegar a las estancias papales, y ahogó a la Benedista con un dildo in boca (que por tanto murió dildodacidada): esto llevó a un Cónclave extraordinario, en el que los cardenales, algo forzados por las circunstancias, proclamaron a la Primera Papisa Trans de la Historia, en una fumata por primera vez rosa: la Suma Sacerdotisa Manuela Trasobares: Una masa enfebrecida, dando saltos, secundada por algunas monjitas, comenzó a gritar in Piazza San Pietro: "¡Viva el Barroquismo!", organizándose luego un macro-botellón, y cuando la gente ya estaba un poco piripi, la Papisa salió al balcón y exhortó a la multitud:

"-¡Tira la copa! ¡Tira la copa!", lo cual la multitud siguió al pie de la letra, eso sí, con vasos de plastico reciclable.

España ya no se llamaba así, nuestro país, en un alarde de superación ulterior de nacionalismos centrales y periféricos, había conseguido llamarse Cataloiberia: Con unos simples pactos del Presidente Herrero (-la verdad un poco absurdos-) habíamos conseguido superar recelos históricos: en frases con más de diez o doce palabras, era obligatorio por decreto decir un si us plau, y un mi arma, y algunas reglas más muy complejas de sintetizar en un blog. Se había instaurado una República, a cuya presidencia se habían presentado Ana Aznar, la Trasobares y Leonor, y Leonor había ganado por goleada a todas (se dice que apoyada secretamente por el Hola y el Lecturas): la Trasobares no había aceptado la derrota, y tras atrincherarse en las Cortes, y romper, en un ataque de nervios, varios documentos que afectaban a la Seguridad del Estado diciendo que eran papelillos, tuvo que exiliarse en Roma, a la que marchó en tren para asistir a los funerales de Raffaella Carrá, acompañada por 100 Trans con sombrillas rojas, por lo que ese período histórico fue denominado "El Exilio de las Sombrillas Rojas". Ana Aznar también se exilió, después de insultar al pueblo desde un balcón y ser abucheada. Huyó a Suiza, pero como el euro había sido sustituído por un billete de papel moneda que se llamaba el Omo, tuvo que emplearse como criada de un matrimonio ruso, arruinada como toda su familia.

El gobierno homosexual y bisexual, fue imponiéndose poco a poco en todos los países, instaurándose el homosexualismo suave obligatorio entre la población, o a lo sumo, permitiéndose una bisexualidad paritaria. Dicha instauración de homosexualidad obligatoria, fue seguida de forma algo exagerada en algunos países, sobre todo en Polonia, Croacia y en el Norte de Italia.

Los movimientos act-up anti-machismo de las marikas adolescentes, a veces eran enormemente temidos y agresivos: sus visitas a casas, para comprobar si los ciudadanos tenían o no cd's y dvd's de la Carrá eran algo terroríficas. En la mayoría de los gobiernos europeos, aparte del culto a la Carrá (-En Cataloiberia, Leonor bailaba una vez por semana en la TV por cable, un tema distinto suyo-), se había impuesto el culto a los grandes Mitos homosexuales Rainer Werner Fassbinder, Jean Genet, Paul Bowles, Christopher Isherwood, Gus Van Sant, John Waters y Luchino Visconti: cualquier frase o proclama contra ellos, era objeto de una dura reprimenda:

En Cataloiberia, por ejemplo, se había prohibido el nombre de unos famosos modistos, obligándoles a llamarse "Victoriano y Luisete", y en el Norte de Italia, el movimiento act-up de las marikas adolescentes, había entrado en varias casas adoctrinando a la población sobre movimientos pélvicos tipo Carrá. Además se habían repartido gratuítamente libros de Genet, Lorca y E.M.Forster, música de Rufus Wainwright, y una osita que decía que Fassbinder era cursi e intrascendente, fue desnudada delante de la tele de su casa, obligada a calzarse un delantal sobre sus carnes morenas, y en su desnudez, dos marikas adolescentes haciendo de vigilantas, hicieron que se tragara 25 películas de este director, y después diera una charla en los colegios, con partes en alemán.

La población, una vez que se había convertido en masa a la homosexualidad sin problemas, tenía cierto miedo a los comandos de Marikas Adolescentes, pues estos tal vez eran demasiado agresivos en sus adoctrinamientos: se rumoreaba que mordían y arañaban tal vez mucho, demasiado: Así que surgió un anti-movimiento, de signo gay más moderado, que proclamaba que a las Marikas Adolescentes ultra-borrokas, no había que dejarlas morder tanto, y el himno "hay que decirles cuidado con los dientes" fue ampliamente coreado y se convirtió en una proclama para los moderados.