...Y ANNA MAGNANI CANTARÍA A JOSELITO Y DIRÍA: "BUONE VACANZE, RIPLEY".




Pensabas, Ripley de mi alma y de mi corazón, casi que en escribir la última entrada del principio del verano. El esfuerzo había sido tremendo, salvaje, pero necesitabas expresarte, descubrir gente ahí, soñar...

Hacías treinta cosas a la vez, y a duras penas dabas ya más de si: tus comentaristas eran de excepción, a cuál mejor: habías descubierto gente fantástica y maravillosa, única, sensible, original, personal. Entre tus entradas y las suyas, apenas tenías tiempo para vivir aparte, se mezclaba todo: era el mejor Universo que habías podido soñar jamás, una adicción prácticamente, pero te hacía sentir bien. Toda esa gente te hacía sentir bien, y parece que tú a ellos: al menos lo intentabas cada vez que te exponías, cada vez que te arriesgabas a comunicar cosas, a escribir algo.

Un Angel (sólo un Angel podía haber logrado eso), iluminó en un momento insospechado, la entrada que querías escribir. Querías terminar -por el momento- con una canción, un tango de Joselito, nada menos que "Violino Tzigano" (Violín Gitano), y demostrar que esa canción la había cantado en su propia boca, la gran Anna Magnani: una de las actrices latinas más importantes que habían conocido los tiempos: un monstruo de la interpretación irreemplazable, con una luz en los ojos particular, una risa sarcástica e irónica y una voz, personalidad y carácter, como pocas.

Eso no hubiera posible hacía siete, diez días: a veces el Youtube era sólo un engendrito bobo, de gente filmando memeces y mimetizándose, cositas para pasar sólo un ratito, y vídeos de Chewbacca que a tí te daban lo mismo. Pero las olas del mar que ya oías lejanas en tus oídos, y la ayuda de una Musa algo casquivana y caprichosa, que apareció inesperadamente, vinieron en tu ayuda:

El propio Pasolini, en sueños se te apareció, con la Magnani y Joselito, y te dijeron:

-"Queremos que hagas esto, verás": Lo primero, la canción del niño. Luego explicar que la escena de la Magnani pertenece a una de tus pelis favoritas: "Mamma Roma", una joya del Neorrealismo tardío, en el que la actriz italiana interpreta a una ex-señora de la vida que se quiere salir del oficio, que tiene un hijo que se llama Ettore, al que pretende dar un futuro. Poco a poco y con la ayuda de un puesto de verduras, desea convencerse y hacer creer a su hijo, de que les espera una vida mejor: que él no sufra por nada del mundo lo que ella ha sufrido, que la vida no le tuerza, ni le lleve por el mal camino....

"...Luego, antes, pondrás un vídeo que te ha ayudado a hacer Germán, que casi os vuelve locos, porque habéis hecho casi que diez montajes, ninguno os convencía del todo, y el programa de montaje se comía la mitad de los nombres. Como el vídeo ya llevaba un tiempo hecho, faltará mucha gente, -te habrás olvidado de la mitad de los bloggers-, pero al menos les habrás dejado algo en el que puedan salir más o menos algunos que has leído y admiras, con la precisión de que era imposible sincronizarlo con la música, y que casi que tenías que haber hecho algo inacabable". Gracias a Germán, y a los diseños generosos de El Churruán también, habías logrado una cosa que no quedaba mal (-pensabas-).

Anna Magnani te dijo en el sueño: "Anda Ripley, anniamo a Barcellona o qualche parte", y tú le respondiste:

"-Perdona Anna: Tengo que explicar un poco, lo que haces en el vídeo con Ettore, y ya me voy. No me voy inmediatamente, estaré un tiempo respondiendo comentarios, y a toda la gente como merece, pero tomaré un descanso, creo que lo necesito. Esto es más que agotador":

"-En el vídeo, aparte de bailar con Ettore, la canción que sólo a tu amigo Pierpaolo se le podía ocurrir meter tan genialmente, le dices que le vas a enseñar a bailar tangos. Nada de chá-chá-chá. Y añades:

-Ettore, esta canción, si supieras quién la cantaba...Y Ettore te responde:

-¿Y quién la cantaba? ¿mi padre? Y tú, Anna, con tu dielecto romano único, le preguntarías que cómo lo sabía, y si ya salía con mujeres... Le contarías un sueño, en el que estábais en Grecia, sobre una montaña llena de flores. Al final del sueño, dirías que te pusiste a correr como una loca, porque el chiquillo, en el sueño, te quería encarcelar, y él, riéndose, trás intentarle enseñar a bailar, te contestaría:

-¡Menuda chapuza de Tango que nos ha salido!

"Y tu reirías, como siempre"...Y seguirías soñando con todos tus bloggeritos, que eran cada uno en lo suyo, casi oro puro: Dos entradas al final de Julio, tal vez alguna en Agosto, y les dejarías con el Tango, mientras tu pequeño cuerpecito descansaría del diabólico teclado, sobre el que tu columna vertebral casi se juntaría con las cervicales, si seguías así. Y en el que tus ojos, mirando una pantalla, con un ligero picor, soltarían una pequeña lágrima, que no quería decir nada más que segurías allí pronto, con todos, y que necesitabas un ligero descanso de aquel ritmo salvaje, que te había impuesto el tesoro, de tener a toda esa gente, que cada vez que te habías lanzado desnudo al vacío, te había acompañado....

...Que te acompañarían en cada brazada que dieras en el mar, alejándote, flotando, como la pequeña gota que eras que apenas sabía de nada: poco más que un puntito en la inmensidad, que pronto, con el mismo riesgo de un simple triple salto mortal sin red, intentaría devolverles nuevas ideas y cargar las pilas....