Los amores de Ripley, pensó el interfecto, podrían dar para una entrada: más que para una entrada para una blogosfera completa, y no era cuestión de ampliarlos, hablar bien o mal de ellos, o siquiera hablar ¿para qué? No había llegado el día en el que ese tema escaseara tanto, o tuviera tal pavor, tal completo pavor a una persona, esa persona que lo llenara todo: y si la hubiera, estaba seguro de que repetiría en sus labios aquélla frase, que una vez, en tono burlesco, le había soltado su Ex, su gran ex, con el que tal vez podría volver en cualquier momento y casarse por octava vez, como la Taylor y el Burton:
-"Tienes lo peor de todos mis Ex juntos..."
Alomejor, lo mismo que otras personas se construían una "bodeguita" en la planta de abajo (que no sin cierto tono altivo y cursi habían venido a llamar "La Enoteca"), había pensado en llamar a un ebanista y reconstruir en una habitación el sueño de Marcello Mastroianni en "La cittá dell Donne": (una cripta con las fotos y voces de todos sus amantes ¿qué miedo no?) ..Sólo que por primera vez, el Ripley estaba disfrutando de una temporada larga, ciertamente algo larga, sin hombres a la vista, que comprometieran su vida, sus desvelos y en los que pensar: Había cambiado de colonia personal (ahora era Acqua di Parma) , y se mareaba sólo de pensar en la idea de dos cepillos de dientes en el mismo vaso, ¡pero qué asco, dios mío! No, cada uno en su casa y dios en la de todos, luego vienes de visita, o de excursión, como todo el mundo. Y si te he visto no me acuerdo...es lo mejor ¿No?...
Aunque bien visto, ¿no era verdad que Ripley siempre tenía un amor, y que jamás hablaba de él, ni se hacía fotos con él, y por eso, precisamente por eso, podía realmente tenerlo? Ser pareja no oficial del indeseable bloguero, o un romance de verano, siempre tenía sus ventajas. Siempre teníamos la enorme ventaja de saber que nuestro adorado/ amado/ entrañable enemigo, ávido de carroña, también nos leía, y podíamos hacerle creer, con todos los honores del mundo, que la ventaja de no tener una vida excesivamente pegada a internet, ni contada por éste, era un sueño de la razón que producía monstruos, monstruos tan solos y pendencieros, que como los antigüos vaqueros, y por un puñado de dólares....
...No eran otra cosa que buscadores de fortuna, fulleros, solitarios cascarrabias de alcoba, aventureros,y bebedores compulsivos, que siguiendo el rastro de los buitres y los quebranta-huesos, se dirigían en un reducido puñado hacia el Sur, y algunos, en sus viejos rocines, más muertos que vivos como El Cid:
"-Eran hombres que cabalgaban y llegaban solos."
Tal vez ahí residía el placer...De lo contrario, Gary Cooper, correría el enorme peligro de que lo liaran con Burt Lancaster: no sería la primera vez que se oían esos rumores de vaqueros, que puede que se hicieran juntos demasiadas millas al día, cociéndose sopas de Avecrem en cacillos demasiadiado pequeños y oxidados, como para no sospechar... Pasando juntos más tiempo del que se suponía en dos hombres de pelo en pecho: las damas de compañía, harían enormes apuestas, en las cantinas del Missouri, sobre cual de los dos era "Top", y cual "Bottom": Empiezas por lavarte un poco tus elegantes y prietas nalgas en un arroyuelo de montaña, sólo por la cosa de ir bien, y conjuntado, y acabas por intercambiar la silla de montar, para ver cuál de las dos es más cómoda. Mala cosa que un hombre ande sin mujeres, que lo laven y le remienden los pantalones...Demasiado mala, pero todo se inventa. Tampoco es tan difícil ponerles una india guapa detrás, con la que parezca que a los dos se les van los ojitos...
...Miro a mi hombre casado y asiente... "Eres un vaquero" -me dice: "Y los vaqueros sólo sabéis cantar canciones de amor, con los pantalones rotos: No te pongas Saritísimo, Ripley, y en cuanto al Mausoleo de Amantes Ilustres de Mastroianni, en "La ciudad de las Mujeres" , pues aún te queda medio mausoleo, gañán..."
El Mausoleo de Amantes Ilustres de Mastroianni-----http://www.youtube.com/watch?v=01nRCiy93SQ