NO OSCARS FOR POLANSKI

Las que son para Ripley las dos mejores películas de 2010, no estarán en los Oscar, ó sólo parcialmente. Aunque ambas quedan muy, muy por encima del resto de películas que ha visto y son un placer que nos reconcilia con el cine, un punto y aparte. La primera de ellas es "Io Sono l'amore" (I am Love, Yo soy el amor), la deslumbrante película de Luca Guadagnino que le confirma como el nuevo gran peso pesado del cine italiano: Protagonizada por Tilda Swinton, narra la decadencia personal y económica de una gran familia milanesa. Estuvo relativamente poco tiempo en cartel, y por su música, fotografía, puesta en escena e interpretaciones, es probablemente la gran película del cine europeo que todo el mundo debería ver. Algunos espectadores que la habían visto en su estreno afirmaban: "Ha nacido un nuevo Visconti en Italia". Ante comparación tan poderosa, Ripley acudió a verla y en cierta forma, pensó que la idea no era del todo descabellada: el film tiene una impactante, trabajada factura estética y unas grandes interpretaciones. "Yo soy el Amor" sólo ha conseguido una nominación al mejor vestuario para los Oscar, pero curiosamente ha estado y está presente en todos los grandes premios. Que todo el mundo corra a verla, alquilarla o se haga con ella.

La segunda, no sólo es la mejor película del cine europeo de 2010, es la mejor película de todo el cine que se ha hecho el año pasado, y supone la rehabilitación definitiva de la figura de Rajmund Roman Liebling, el mayor cineasta vivo que queda sobre la tierra. El film, que no estará en los Oscar, cosa que no es de extrañar, pues nos presenta un Thriller-ficción sobre los vuelos secretos de la CIA y otras lindezas, que afectan a un ex-primer ministro británico que anda escribiendo sus memorias, consiguió acaparar todos los grandes premios del Festival de Berlín y hacer pleno en los últimos Premios del Cine Europeo (mejor película, mejor director, mejor guión adaptado, mejor actor protagonista, mejor banda sonora). Los últimos veinte minutos de este thriller, son probablemente los mejores del último cine filmado en años, y su fastuoso final, con la partitura de Alexandre Desplat, el mejor final de todos los thrillers que se han filmado en mucho tiempo. No importa que este año Rajmund Roman Liebling (Roman Polanski) no reciba Oscars, porque la cantidad de ellos que tiene y a los que ya ha sido nominado, le sale por las orejas. 2011 es el año de su rehabilitación: los tribunales suizos decidieron que no lo extraditaban a Estados Unidos, y que era inocente de unos hechos más que oscuros y confusos. Y la mejor prueba de ello, es que terminó su última gran película a contrareloj y bajo arresto domiciliario (lo cual tiene un mérito inigualable): Roman Polanski sigue vivo, prepara la adaptación de "God of Carnage" (Un Dios Salvaje) junto con Yasmina Reza, con Matt Dillon, Jodie Foster, Kate Winslet y Christoph Waltz, y es autor de "El Escritor" ("The Ghost Writer"), de lejos, lo mejor que hemos visto proyectado en nuestras pantallas en la temporada. Antes de ver ningún peñazo de Ceremonias de Goyas, Oscars ó Césars (en los que Polanski también triunfará), que nadie se pierda estas dos películas si no las ha visto aún.