LA VIDA SECRETA DE CAMILO SESTO

                           AMANDA DESPEGA ORGULLOSA

Se ha ido un gran Mito, uno de los más enormes que han existido. Aunque sú época de éxito fueran sobre todo los setenta y los ochenta, por  sus canciones, su música y sus letras (se olvida que era un enorme compositor también) no parece haber pasado el tiempo: son actuales, contemporáneas, no han perdido un átomo de fuerza: son buenas composiciones melódicas, algunas absolutamente geniales y totalmente intemporales. Es un Mito que será más Mito cada vez, a pesar de las habladurías, de los cuentos, de las leyendas... (y precisamente por ellas). Nos hemos reído de él en su última época, porque como todas las grandes estrellas, no supo envejecer (ninguna gran Estrella sabe hacerlo del todo) y acabó siendo en cierta medida una caricatura de sí mismo. Pero fue una Estrella Planetaria, tremendamente disciplinada, vocacional (puede que algo excéntríca, sí), que sobrevivirá en generaciones, porque vivió y dio su vida para el público, para la música, y la mayoría de los que se rieron nunca llegarán a ser nada, ni su pálida sombra. ¿Tuvo una vida secreta?: Es posible ¿Qué gran Estrella no la tiene?... Pero ahora eso qué importa: Todas las Estrellas tienen vidas secretas...

-¿Que qué hago aquí? -se preguntan: -¡Ya no puedo más! ¡Me estoy peinando mejor que nunca! ¿Saben? ¿Saben mi secreto más íntimo, ese que solo yo sé?

Se alejó del espejo y dio un do de pecho: le gustaba darlo en el garaje, porque el garaje tenía eco... "¡Ay, Cami, Cami!" -se decía a si mismo: "¡Si hubieras nacido en Estados Unidos ya tendrías tres Oscar honoríficos! ¡Ay, Cami!..." Tal vez era él, tal vez el doble de él, tal vez era a veces lo que fue y otras veces alguien cambiante, alguien que ya no sabía quién era... Al fondo, tumbada en un diván había una persona desnuda, la mucama decía que era otra persona conocida del mundo de la canción, pero no se podía decir quién: en esa casa todo fluía... pero a nada se le debía poner nombre.

Nancy, la mucama no quería contar, no quería hablar..., lo mismo que el jardinero, que cada vez que le preguntaban en el supermercado, se tapaba la cara con una mano... "¡Ay Cami, si hubiéramos nacido en Connecticut!..." ¡Qué maledicentes y olvidadizos son tantos con las glorias propias! ¡Qué pronto pasan cincuenta y un discos de platino seguidos!

Pero Nancy tenía una prima... y esa prima tenía una hermana... y la mejor amiga de la hermana contaba cosas, secretos de la casa de Torrelodones que decían que eran verdad, confidencias de ese encierro y enclaustramiento voluntario, alejado de los focos y de los escenarios.

La amiga de la hermana de la prima de Nancy tenía cosas que contar, pero solo a las personas cercanas... Cuando tomaba un  suave ronsito caribeño, se explayaba en los chismes:

"Cami mira sin parar AMANDA, no para de verla obsesivamente: una película vanguardista que le encanta. No le gusta mucho el fútbol, pero a veces se levanta diciendo que es del Madrid, otras veces que del Barça y algunas dice que es del Boca Juniors, y entonces se pasa tres días hablando con acento argentino, y todos nosotros tenemos que hablar también con acento argentino, y nos hace ver como tutoriales entrevistas de Mirtha Legrand...

Nos tiene terminantemente prohibido decir los nombres propios "Juan" y "Gabriel" en su presencia, y como se nos escapen los dos combinados, tiene escondida una pelota de tenis que nos lanza a la cabeza ¡Con espléndida puntería! En privado hay días en los que le tenemos que llamar Camille, cuando se afrancesa, y entonces nos hace decir: "merci, merci" y "Bonjour, Camille". Sin embargo, si abusamos del francés, de pronto nos mira perplejo y nos pregunta que qué coño hacemos hablando así a un señor español de Alcoy, Alicante...

Después de comer siempre se pone siete modelos de gafas de sol seguidos y al atardecer, a veces pañuelos de seda o velos negros sobre la cabeza, porque algunos días dice que es extraterrestre y que van a aterrizar varios platillos volantes con habitantes de otros planetas con los que ha contactado por un chat de Extranet para hacerle entrevistas... (Camilo tiene una exclusiva red secreta especial, como la Reina Isabel, Trump y el Rey Juan Carlos conectada con otros planetas, que se llama Extranet: Extranet es selecto. No es gratis y no lo será nunca: ahí no hay bocachanclas, pseudos setenteros, influencers ni millennials ociosos, contando todas las huevonadas que les permite su tiempo libre (los odian), ni instagrammers, bloggers o facebookers fingiendo vidas maravillosas: No te puedes dar de alta tu ni fingir una vida maravillosa si de verdad no la tienes, te da de alta un Marciano de una Civilización Superior).

...Camina a veces desnudo por las noches junto a un chimpancé que se trajo de un viaje, cuando está desvelado..., porque el chimpancé (que se llama Bernardino) se lo pide de rodillas... Camina desnudo cantando arias de ópera en las tres habitaciones insonorizadas que no tienen ventanas.

...Tiene visitas de personas bellas y jovenes alguna vez, y a la medianoche van a bañarse a la piscina que está en suave desnivel, en un ambiente aparte, alejado de la servidumbre, y se oyen gritos y susurros en las casetas de la piscina, a veces risas y a veces llantos como de bebé, pero de eso solo sabe el chimpancé Bernardino, que está todo el rato con ellos.

...Eso de que no sale nunca, nunca, nunca, y de que no le puede dar la luz del sol directamente, no es del todo cierto: a veces deja que un rayo ilumine a través de los visillos sus preciosos ojos color lapislázuli. Cada vez que se descubre una arruguita, pega un grito terrorífico tremendo ¡tiemblan los cimientos!

...Algunos sábados junto con el jardinero (que también es maquillador y esteticista) y el chófer lo preparamos... Y de madrugada lo llevamos de incógnito a un After de Arganda: Allí creen que es otro. Es un bar especial para drags, camioneros y gente del Este, que regenta un torero retirado. Creen que es otro..., mejor dicho, otra, porque va disfrazado de Francesca Settima con una peluca rubia hasta la cintura:

Es una excentricidad más, que solo tiene que ver con interpretar. Todos los artistas necesitan ser otros y otras, vivirlo, ser muchos y muchas, crear personajes: Camilo ya es mucho, demasiado Camilo, y eso a veces pesa, por eso nadie conoce a Francesca Settima, la maliciosa e incógnita transformista invidente con su bastonsito... ¡Le encanta tantear la moqueta con el bastón, golpear a gusto pantorrillas como si lo hiciera inocentemente, quitarse los zapatos de tacón si los lleva mucho tiempo! ¡Y sentarse un ratito en un rincón mientras saborea un Bloody Mary y fumarse dos Marlboritos light en una boquilla de plata, que lleva oculta en un liguero con pequeñas rosas rojas de satén cosiditas bajo el vestido! ¡Y enseñar su uñita del dedo gordo del pie pintada con brillitos purpurina!..."

Pero no pregunte ni quiera saber demasiado... Todos siempre quieren saber demasiado..., y yo no sé chismes ni le he contado nada, es solo efecto del ronsito  que me regaló... Soy romántica ¿Sabe? Y yo siempre me voy a enamorar de quién de mi no se enamora...(¡Y es por eso que mi alma llora!): ¡Así que por favor no me invite a más ronsitos para sacarme confidensias!
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